El jueves pasa sin pena ni gloria. Sigue saliendo diariamente en la prensa el engaño al que nos somete nuestro gobierno, diciendo que no hay muertos por COVID-19 en España y sin embargo Madrid y Barcelona diariamente notifican entre 5 y 10 cada una. Pero ellos indican que no pueden notificar oficialmente esas cifras, porque cada Comunidad tiene sus cuentas y sus formas de contabilizar. Y yo que pensaba que a estas alturas de la pandemia ya tendríamos aclarada la forma de recuento. Pues parece que no.
Por otra parte a medida que empieza esta nueva normalidad empiezan a surgir nuevos focos. El gobierno dice que los tiene controlados, que está poniendo en cuarentena a todos los que tienen contacto con esas personas. Ya somos muchos los que pensamos que no llegamos a agosto sin volver a estar encerrados de nuevo.
Y ya el colmo de los colmos es que ahora tenemos que rechazar a las racistas y fascistas "chucherías" de chocolate "Los Conguitos". Se fabrican en Zaragoza y ahora piden que a partir del 1 de julio sean comercializados con otro nombre, para evitar ser racistas y no hacer mención a los habitantes del Congo, que por cierto se llaman congoleños. Pero a este paso vamos a tener que cambiar también el nombre del famoso "brazo de gitano" e incluso el fruto del moral que llamamos "mora". Está visto que con tal de desviar la atención de lo que realmente es importante y necesario, podemos inventar cualquier otra conversación. Pues lo siento mucho, pero para mí los Conguitos seguirán siendo eso, las bolitas de chocolate y cacahuete tan deliciosas que hemos comido toda la vida. Aunque ahora también los tengamos en la versión de chocolate blanco, que por supuesto, no se dice nada de si son racistas o no.
Así que, ahí queda, el anuncio de los Conguitos de 1994.
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