El mes pasado fueron 35 millones en coches todoterreno para combatir con las mafias de drogas y con las mafias de personas. Este mes son 30 millones con el mismo destino y pregunto: ¿cuánto será el mes que viene? Porque ¿alguien se ha creído que ese dinero tiene ese destino que han dicho? No se lo creen ni ellos.
Ahí tenemos un rey que está entre los primeros de la lista Forbes, la lista de los más ricos del mundo. Un hijo que es el joven más rico con la edad que tiene, y mientras tanto un pueblo que se muere de hambre, de miseria, de falta de sanidad, analfabeta...
Y mientras tanto, el presidente Sánchez volaba a Ceuta y acto seguido a Melilla. No sabemos muy bien con qué fin. ¡Ah, bueno! para "solidarizarse" con la situación del pueblo ceutí y del pueblo melillense. Tanto en Ceuta como en Melilla ha sido recibido entre pitos, abucheos, increpaciones... Menos mal que habían avisado a los palmeros de turno que lo recibían con aplausos y el puño en alto.
A puño en alto el que escribía Gloria Rojas a la salida del Ayuntamiento de Melilla acompañada de Sánchez. ¿Qué celebraba? Pues no lo sabemos muy bien, porque salía saltando, aplaudiendo, con el puño en alto y alentando a sus palmeros a que gritasen más fuerte que los que le pitaban y gritaban que se fuera. Es posible que celebrase que el presidente Sánchez había acabado pagando el chantaje de Marruecos. Quién sabe. Lo cierto es que ella expresaba una gran alegría con su traje rojo y la acompañaba la Delegada de Gobierno, la señora Moh, vestida de verde que también levantaba el puño en señal de victoria.
Y tras la rápida visita en Ceuta y Melilla, vuelta a Madrid. Supongo yo que a seguir dando órdenes para subir los impuestos, para crear nuevos impuestos. Hay que recaudar 30 millones de euros que se han ido a Marruecos y por supuesto, pagar el gasto de su viaje a Ceuta y Melilla. Gasto de todo su séquito y la movilización de policías para poder hacerse la foto en Ceuta y Melilla. Y mientras tanto, los policías, los militares, los voluntarios de Cruz Roja, dando la cara y recogiendo a los migrantes que llegan a la playa exhaustos. Devolución en caliente o no caliente, pero han accedido al chantaje de Marruecos.