100 días después del estado de alarma, comenzamos una "nueva normalidad". Todavía no sabemos muy bien en qué consiste esta nueva normalidad. Para muchos significa que volvemos a la normalidad de nuestras vidas y por lo tanto, olvidamos lo que hemos vivido en estos tres meses largos. Ahora se ve que no hemos aprendido nada, que no ha pasado nada y que esto ha sido un "descanso" para nuestras vidas tan ajetreadas. Así que a partir de hoy, retomamos nuestra vida diaria con normalidad. Y esto es un error. Esta "nueva normalidad" es o supone vivir en nuestro día a día, pero con el recuerdo que hemos vivido tres meses con muchas precauciones y por lo tanto ahora debemos vivir con lo que hemos aprendido. No podemos seguir "malgastando" nuestras vidas y nuestros recursos como lo estábamos haciendo. No podemos seguir derrochando como si no pasase nada. Tenemos que aprender a vivir con continuas "plagas" que nos atacan con fuerza. Pues vamos a ponernos en marcha.
Y mientras nos ponemos en marcha en esta "nueva realidad", algunos se empeñan en evadir la realidad y la situación, creando otros problemas. Ahora están relacionados con las estatuas de todos aquellos que ofenden y recuerdan historias de explotación. Y es que está visto que el revanchismo histórico solo se ceba con los que ellos quieren y desean. Todavía no he visto a nadie pintando "racista" o "fascista" en una imagen de Lenin, o de Stalin. Pero sí en aquellos que ayudaron de una manera o de otra a los indígenas de América. Nos hablan de genocidio y se olvidan de otros genocidios. La verdad es que toda esta maniobra de despiste está provocando que nos olvidemos de problemas más importantes y que todavía están ahí. Por ejemplo, es más importante si tiramos o no la imagen de Fray Junipero Serra, colaborador y protector de los indígenas en San Francisco que el rechazo del plan de rescate Sánchez-Iglesias que han propuesto a la Unión Europea y que esta ha rechazado de plano. Lo primero que les ha exigido es que reduzcan el gasto político, asesores, directivos, chóferes particulares..., ya que Europa no está dispuesta a pagar todos nuestros despropósitos. Y claro, por ahí no pasa el plan Sánchez-Iglesias. Así que, señores españoles, les han dicho desde Europa, no esperen dinero para sus planes como "la paguita", que ven más como una medida electoral que de ayuda.
A lo largo de este primer día hemos oído noticias de repuntes en diferentes lugares. En Murcia por un turista que ha llegado de Bolivia a través de Barajas. Ya lo ha anunciado la presidenta de Madrid, Barajas no tiene las condiciones para evitar ser un coladero. En Huesca en una producción hortofrutícola. Pero quizás la más preocupante puede ser en Canarias a través de la llegada de varios cayucos llenos de inmigrantes infectados de coronavirus. Llegan de Marruecos, cosa que nos tiene que alertar de cara a las ciudades de Ceuta y Melilla. No sabemos lo que puede haber allí, pero lo cierto es que están llegando inmigrantes cargaditos, con lo que habrá que frenar la posible expansión poniéndoles en cuarentena. De momento Marruecos ya ha señalado que este año no hay operación paso del estrecho. Otra nueva ruina para muchos negocios de España que dependen en verano de estas personas que bajan y suben de Francia a Marruecos y viceversa. Vamos a ver cómo cubrimos tanta ausencia de turismo un país que depende exclusivamente del turismo.
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