Un fin de semana más finaliza. Hemos tenido más clientes que el pasado. Se nota que ya van conociendo que volvemos a estar abiertos. Aún así nos queda mucho para volver a la normalidad, ya que, por las condiciones no podemos atender al 100%. También es verdad que hoy a medianoche, termina el estado de alarma, aunque seguimos con las condiciones propias de las Comunidades. En nuestra ciudad podremos atender al 100% en las terrazas (cosa que a mí no me afecta) y el 75% en el interior. Tendré que volver a reestructurar la organización del espacio para poder ampliar el número de clientes. De todas formas, tampoco muchos más. Lo que sí tengo claro es que vamos a seguir con las nuevas novedades introducidas: mascarillas, hidrogel, servicios individuales, horarios de cierre bien claros y cumplirlos, mantener a la gente fuera cuando esté el aforo completo, limpieza e higiene. Eso, de alguna forma nos beneficia en nuestro servicio.
Lo que no se puede repetir son escenas como la de la fotografía. Son del sábado por la noche, cuando todavía estábamos en estado de alarma, donde los horarios eran hasta las 1:00h de la madrugada, las imágenes son de las 3:00h. Más de 300 personas, sin mascarillas, sin distancias... Uno al verlas se pregunta: ¿dónde está la policía para sancionar ahora? Durante el tiempo de estado de alarma han llegado a multar por salir a la calle y ahora que la gente está en la calle ya no multan aunque se produzcan aglomeraciones como esta. Creo que deberían sancionar a los locales y a los clientes. Porque tanto unos como otros son culpables. Es evidente que esto no ha terminado, que tenemos que acostumbrarnos a vivir con ello y por lo tanto es necesario que mantengamos unas normas mínimas. De lo contrario antes de septiembre estaremos en las mismas y personalmente creo que el cierre nuevamente de toda la economía del país, puede ser catastrófico, por no decir la ruina. Ahora mismo nos hemos metido en una deuda de la que nos va a resultar imposible salir. La herencia que les vamos a dejar a nuestros hijos es lamentable.
De todas formas esto es lo que quieren nuestros amigos comunistas de Podemos. Su idea es destruir el país para hacerlo a su gusto y medida. Pero no se dan cuenta que el comunismo ha caído en el año 89, que se descubrió que fue un engaño que no sirvió. De todas formas tampoco el capitalismo destructor y antipersona en el que vivimos es la solución. Mientras vivamos en un mundo en el que los ricos quieren ser más ricos y los pobres quieren equipararse a los ricos, esto va a ser una ruina.
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